Le hemos dado muchas vueltas al título de este blog post «El terror de los logos»… Tal vez porque suena un poco trágico, o porque realmente nos asustan algunos logos como le asusta a un niño el monstruo del closet, o como quedarnos sin batería en el celu justamente cuando necesitamos waze para encontrar una dirección.

¿Estás preparado(a)?. Bueno te recomendamos leer esto en un lugar tranquilo, iluminado (bueno si te da susto la oscuridad), lleno de atención y sobre todo en una zona confortable para  generar un cambio o para seguir adelante.

Hablar de logos (Sig. distintivo compuesto por letras e imágenes, de una empresa, una marca o un producto) nos llevaría años, pero hoy queremos compartir con vos 5 puntos que -para nosotros- forman parte de la serie de horror: «El terror de los logos» (boo) ?

1. Ser emprendedor y crear tu propio logotipo

A veces creemos que ser emprendedor implica tener una imagen pobre. Estamos acostumbrados a escuchar frases como  «cuando esto prospere hago el logo», «cuando gane más, invierto en imagen», «yo no sé nada de comunicación, pero sé manejar Paint / Publisher para hacer mi logo».

Nuestra sociedad está llena de home makers. El hecho de ser emprendedor no quiere decir que tu imagen deba de percibirse pobre.  El logo generalmente es la primera imagen que ve el cliente, es la primera impresión, además del servicio o producto que ofreces, el logo tendrá un papel muy importante en la opción de compra.

Si vas a emprender, lo ideal es comenzar con toda la fuerza y reservar un rubro de tu presupuesto para trabajar la imagen… recuerda esa frase «todo entra por los ojos» y así es la comunicación y por ende el mercadeo.

Imagina un logo pixelado que se utilice como ícono una imagen que descargas de Clip-art ¿te gustaría comprarle el servicio a una empresa que utiliza un logo así? Imaginemos otro escenario, descargas un logo de un sitio gratis que encontraste y de un momento a otro lo ves replicado por varias empresas… nada qué decir… cero identidad y cero credibilidad.

Tu producto o servicio merece calidad, así como la calidad de la que está hecho el cupcake que vendes, o las flores con las que decoras. No permitas que por un mal logo tu producto no tenga el impacto o no genere el mensaje adecuado.

2. Abuso de las tipografías (letras)

Partamos del punto en que no vas a poder enviar a diseñar tu logo y recurres a desarrollar el nombre. Buscas una tipografía apta para tu imagen. Eso está bien, a veces preferimos un logo tipográfico simple y fresco para comenzar… sin embargo, el ataque del creativo que llevas dentro te traiciona y sin bases de diseño ni estética comienzas a ver miles de tipografías y ¡home run! haces una combinación de letras que no tienen nada que ver con la naturaleza del negocio.

Las tipografías son como los colores, poseen un significado dependiendo de su forma y cualidad, este significado lo conoces mediante investigación y estudio.

3. Uso inadecuado del color

Al igual que las tipografías el color responde a la naturaleza del negocio, aunque en algunos casos puede ser la excepción.

El diseñador que tendrá a cargo tu logo, deberá investigar y buscar el tono adecuado para tu empresa, así como el uso de efectos tales como gradientes, saturados extremos y texturas.

No solo deberá analizar estos efectos para transmitir el mensaje correcto, si no que deberá estudiar si un efecto que utilice es aplicable para web, impresos o incluso la utilización en bordados y acabados especiales.

4. El ícono te juega una mala pasada

No todas las empresas necesitan un ícono de apoyo en el logo. El ícono puede ser tu gran amigo o al contrario la tragedia de la marca.

Hemos observado logos tan complejos que incluso utilizan un efecto realista en el ícono, lleno de detalles que justo cuando haces pequeño el logo ni se ven, al contrario, solo podes ver una mancha profunda de lo que fue un ícono.

Esto sucede mucho cuando los elementos son personas, animales o elementos de la naturaleza.

El diseñador deberá proponerte hacer una estilización de ese elemento, para que a la hora de hacer el logo pequeño, el elemento aún tenga cierto reconocimiento visual. Bien lo decía nuestro profe Walter Behrens en la «U» ¡Menos es más!

5. Tienes un logo espectacular, pero no tienes idea de cómo usarlo

Hicimos la inversión de tiempo y dinero en el desarrollo del logo con el especialista… pero no sabemos utilizarlo correctamente:

  • Lo escalamos como queremos: afectamos su tamaño horizontal o verticalmente. Lo aplastamos o lo convertimos en un logo con zancos altísimo y totalmente desproporcionado.
  • Tenemos la opción de utilizarlo sin fondo y le colocamos un fondo blanco gigante alrededor. Si el diseñador te entregó la opción de utilizar el logo sin fondo ¡usémoslo!
  • No tener a mano las variantes. Guarda los archivos digitales del logo en un lugar de fácil acceso (drive, dropbox, etc) para que lo encuentres rápido y puedas enviarlo al que lo necesite.
  • No necesariamente la tipografía con la que está diseñado el logo será la que debas usar en todo lo que haces. Por ejemplo no ves a Coca-Cola usar la misma letra del logo en toda su publicidad, recuerda que la publicidad se rige por tendencias sociales, entre menos compleja sea la letra mejor será la comunicación.

Esperamos que esta información te sea de utilidad en el caso de querer emprender o si ya vas en el camino del emprendimiento a cuestionarte cómo vas y si es el momento de cambiar y no ser parte del terror.

El diseño es el embajador silencioso de tu marca.”

(Paul Brand).